Tragedia en el Himalaya: muere alpinista francesa de 63 años en el Kanchenjunga
La comunidad montañista internacional se encuentra de luto tras la trágica muerte de Margareta Morin, una alpinista francesa de 63 años que falleció el pasado sábado mientras intentaba alcanzar la cima del Kanchenjunga, la tercera montaña más alta del mundo con 8.586 metros de altitud. La información fue confirmada por Yogendra Tamang, representante de la compañía organizadora Peak 15 Adventure.
Morin sufrió un accidente cerebrovascular, presuntamente provocado por el mal de altura, en el campamento 6, una de las últimas etapas antes de llegar a la cumbre. Debido a las condiciones meteorológicas extremas, los equipos de rescate no pudieron recuperar su cuerpo. “No pudimos recuperar su cuerpo debido a las condiciones meteorológicas”, informó Tamang a la agencia AFP.
Mientras tanto, en un hecho paralelo ocurrido en la misma montaña, el escalador británico Adrian Michael Hayes también enfrentó complicaciones por mal de altura durante el descenso. A diferencia de Morin, Hayes logró ser evacuado exitosamente, según reportaron medios como Daily Mail y The Sun. Ambos formaban parte de expediciones distintas, pero sus casos ilustran los riesgos extremos que implica escalar montañas como el Kanchenjunga.
El Kanchenjunga, ubicado en la cordillera del Himalaya en Nepal, es conocido entre los expertos como uno de los picos más técnicos y peligrosos del mundo, debido a su altitud, condiciones climáticas impredecibles y terreno escarpado. Las expediciones suelen realizarse durante las temporadas de primavera y otoño, cuando el clima es más favorable.
La muerte de Morin se suma a una serie de accidentes fatales recientes en Nepal. La semana pasada, el escalador estadounidense Alexander Pancoe, sobreviviente de un tumor cerebral, perdió la vida en su intento por escalar el Monte Makalu, la quinta montaña más alta del mundo. Asimismo, el mes pasado, un alpinista austríaco falleció durante el descenso del Ama Dablam, otra montaña icónica de la región.
Con estos tres fallecimientos, la temporada de primavera —que va de abril a principios de junio— ha estado marcada por una creciente presión sobre los recursos de rescate y un aumento sostenido en el turismo de aventura. Solo para esta temporada, el gobierno de Nepal ha emitido más de mil permisos de escalada, 75 de ellos para el Kanchenjunga, lo que pone en evidencia el auge de esta actividad, pero también la necesidad de reforzar medidas de seguridad.
Nepal, que alberga ocho de las diez montañas más altas del mundo, incluido el Everest, se mantiene como el epicentro del montañismo global, aunque las tragedias como la de Morin subrayan los altos costos humanos que aún conllevan estas hazañas.
Fuentes varias