¿Tarifas de la energía canadiense afectarán las facturas de servicios públicos de CT?
A principios de febrero, el presidente Donald Trump anunció planes para imponer nuevos aranceles a las importaciones procedentes de Canadá, incluyendo un recargo del 10% sobre los “recursos energéticos”, aunque su administración no dio detalles inmediatos sobre su significado exacto.
Como resultado, ha surgido confusión sobre si esto se aplicaría o no a la electricidad que fluye a través de la frontera entre Estados Unidos y Canadá por líneas de transmisión, una fuente vital de energía, especialmente en Nueva Inglaterra. Para complicar aún más la situación, muchos de los aranceles del presidente se suspendieron posteriormente, lo que dio a los funcionarios de ambos lados de la frontera más tiempo para negociar.
Mientras tanto, Trump ha seguido amenazando con imponer aranceles aún mayores a Canadá si el país intenta tomar represalias causando un “daño económico” a Estados Unidos.
Hasta esta semana, el operador regional de la red eléctrica de Connecticut, “ISO New England”, no ha recibido ningún cargo por aranceles de importación, según una portavoz. Sin embargo, la amenaza de las tarifas energéticas complica los esfuerzos de los líderes de Connecticut para abordar los costos de electricidad, que son frustrantes por lo altos, en parte debido al suministro limitado de las centrales eléctricas locales.
Durante un foro organizado por CT Mirror la semana pasada, el Gobernador Ned Lamont afirmó que una tarifa del 20% —superior a la propuesta de Trump— sobre la electricidad canadiense costaría a los clientes de servicios públicos en Connecticut alrededor de 100 millones de dólares.
“Estamos retrocediendo”, declaró Lamont, criticando a continuación la estrategia de la administración Trump hacia el vecino del norte de Estados Unidos. “No entiendo por qué ama a nuestros enemigos y odia a nuestros amigos”.
¿Connecticut importa electricidad de Canadá?
Sí. Connecticut forma parte de una organización regional de transmisión conocida como “ISO New England”, que opera como una especie de mercado de valores donde las empresas de servicios públicos y los generadores locales compiten para comprar y vender energía.
Algunos de los principales vendedores en ese mercado son generadores con sede en Canadá, cuya electricidad fluye a la red regional, donde se distribuye a los seis Estados de Nueva Inglaterra.
Debido a su abundante suministro de electricidad limpia, los líderes de Nueva Inglaterra han buscado ampliar los vínculos de transmisión con “Hydro-Quebec”, lo que les permite importar más energía para cumplir con los objetivos de descarbonización de cada Estado. El proyecto New England Clean Energy Connect, por ejemplo, consiste en una línea de transmisión propuesta a Lewiston, Maine, que proporcionará 1,200 megavatios adicionales de energía hidroeléctrica —suficiente para abastecer a aproximadamente 1,2 millones de hogares— a los clientes de Nueva Inglaterra.
¿Cómo afectarán los aranceles a las importaciones de electricidad?
En un comunicado publicado a finales de febrero, funcionarios de “ISO New England” afirmaron que solicitaban aclaración al gobierno federal sobre si se aplicarían tarifas energéticas a la electricidad y, de ser así, quién sería exactamente responsable de recaudarlas.
Parte de la preocupación de los funcionarios de “ISO New England” era que, como entidad sin fines de lucro, no tendrían forma de pagar las tarifas si el gobierno federal les cobraba.
“En el peor de los casos, ISO podría verse obligada a declararse en bancarrota y el gobierno federal podría restringir o prohibir las importaciones de electricidad canadiense a Nueva Inglaterra hasta que se paguen los aranceles”, advirtieron funcionarios en otro memorando de febrero.
Para evitar tal escenario, la organización solicitó a la Comisión Federal Reguladora de Energía (FRE) que estableciera un proceso para evaluar el costo de cualquier arancel a los importadores de electricidad, quienes presumiblemente, a su vez, repercutirían los costos a las empresas de servicios públicos y, eventualmente, a los consumidores.
John Moritz (CT Mirror)